Con la idea de dar asistencia legal a firmas que operan en distintos países de la región o asesorar a las startups que iniciaron el camino de la regionalización, tres estudios jurídicos de la Argentina (ba Agogados), Chile (Ovalle - Consejeros Legales) y Uruguay (Castellán Legal | Fiscal | Contable) decidieron fusionarse y crear una única firma, B-Conex Latam. Integradas como red desde hace unos cinco años, decidieron dar un paso más en el proceso, con el objetivo de que las compañías tengan un único interlocutor más allá del país en el que estén operando.

"A diferencia de otros modelos, tenemos una sociedad integrada como nueva entidad legal. En los años que llevamos colaborando se generó una sinergia que derivó naturalmente en esta fusión. Tenemos, además, firmas de otros países que integran la red, pero que no son socios", explicó Ernesto Sanguinetti, socio de Pasbba Abogados.

La nueva firma, agregó, nació por la necesidad de asesoramiento transnacional que vieron en los clientes de los tres estudios de abogados. Se trata de una oportunidad de negocios que aún no estaba explorada.

"Esta experiencia tiene como diferente que somos una única firma, con modelos trabajo similares y tecnología similar. Sin embargo, la integración no diluye la entidad de cada uno de los socios que la conforman", agregó Javier Ovalle, de Ovalle - Consejeros Legales.

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La principal diferencia que ofrece B-Conex Latam está en la posibilidad de contar con un solo interlocutor de alto seniority a las empresas que operan o desean expandirse en América latina. De esta manera, buscan minimizar riesgos y simplificar la relación entre las compañías y el estudio.

La nueva firma cuenta con más de 50 profesionales senior, organizados en equipos de trabajo activos en las áreas Fiscal, Laboral, Corporativo y Disputas.

"Al unirnos podemos ofrecer un servicio diferente, que potencia lo que cada uno hace en el ámbito local. Además, la colaboración firmas de otros países nos permite expandirnos a toda la región. Nuestra propuesta de valor es ofrecer un servicio que no solo tenga perspectiva local", aportó Lucía Acosta, de Castellán.

La nueva firma apuntará a dos perfiles de clientes bien diferenciados. Por un lado las grandes corporaciones que tienen presencia en más de un país y que, en muchos casos, prestan servicios compartidos. El otro universo es de las compañías que están empezando a dar sus primeros pasos de expansión regional.

"Nos ofrecemos como facilitadores de la internacionalización. Tenemos toda una red de relacionamiento que ponemos a disposición de los clientes para ayudar en el aterrizaje en nuevos mercados", explicó Sanguinetti.

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A estas compañías, B-Conex Latam les ofrece orientación en la constitución de sociedades, sucursales, filiales, estructuración de t ventures, fusiones y adquisiciones transnacionales (M&A), y reestructuración o liquidación de empresas. También ofrece asesoramiento en contratos internacionales, comercio internacional, planificación fiscal internacional, resolución de disputas, inversiones inmobiliarias internacionales y propiedad intelectual y nuevas tecnologías.

El desafío de la nueva firma, agregó Sanguinetti, es trabajar a la velocidad que demandan los clientes. Eso incluye transmitir no solo las regulaciones normativas de cada país, sino la cultura, para que ayudar a detectar oportunidades de negocio.

"Queremos ayudar a construir confianza para invertir en América latina, que esté en el radar como zona interesante para hacer negocios. La diversidad que tiene la región genera un valor agregado, que a veces es dejado de lado y que puede ser aprovechado por nuestros clientes", aportó Acosta.